Peso respira por el pacto fronterizo

El peso volvió a la vida después de que el viernes pasado a última hora, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump “aplazó indefinidamente” la aplicación de aranceles de cinco por ciento a todas las exportaciones mexicanas, lo que permitió a la moneda mexicana ganar 39 centavos contra el dólar y venderse en un máximo de 19.54 pesos en bancos.

Según Banco Base, este repunte es sólo una recuperación de las pérdidas de la última semana, y no marca un “regreso al optimismo”, pues todavía persisten riesgos de nuevas amenazas contra México desde el exterior, así como la degradación que impuso Fitch Ratings a la calificación de la deuda soberana de México, que se ubica en BBB, así como el ajuste que hizo Moody’s a ese mismo indicador, que ahora tiene perspectiva negativa, es decir que la calidad crediticia podrá bajar en los próximos meses.

El sector financiero también fue ligeramente presionado por el cambio de perspectiva de Moody’s sobre la calificación de cuatro bancos (Santander, Banorte, Citibanamex y BBVA Bancomer). De las cuatro entidades, tres cerraron con bajas marginales después del cambio aplicado por la calificadora el viernes pasado. Sólo Banorte cerró al alza.

Pese a este resultado, la Bolsa Mexicana de Valores mantiene su paso positivo y se ubicó al cierre de la sesión en 43,609, un avance de 0.73 por ciento.